¿Hasta Cuándo?
He creado un “mundo” en el que, si mi cuerpo no se lo pasa bien, todo parece una gran decepción. ¿A ti te pasa lo mismo? Podría apostar mi alma a que sí.
Voy a controlarme de contarte lo que tu alma quiere. Las visualizaciones bajan cuando hablas de lo importante.
Cuando te han convencido que lo importante no existe, o que es indescifrable para ti…
Cuando te han convencido que no pienses por ti mismo porque vas a perder mucho tiempo en avanzar…
Cuando te han convencido que todo se puede obtener rápido y que la vida es tu esclava…
Cuando te han convencido que tu valor depende de lo que tienes…
Cuando te han convencido que el dinero no es energía…
Cuando te han convencido que a todo el mundo le va bien (sobre todo a los que peor te caen), menos a ti…
Cuando te han convencido que sólo quieren cuidarte porque eres un ser indefenso…
Y así podría estar la eternidad… Podría tatuar tu piel entera con toda esta basura mental.
Lo que te han dicho para convencerte no es importante, lo sustancial es que te lo has creído. Así que eres Responsable. Soy Responsable.
“Show must go on”.
Es imparable, hemos creado una maquinaria de entretenimiento y falso ocio para que no podamos parar. El sistema ha colapsado, pero si nos ponemos todos/as de acuerdo para que el consumo siga creciendo, el chicle lo podemos seguir estirando un poquito, muy poco, suficiente para que no despertemos de nuestro sueño.
¿Qué ocurre si nos aburrimos un periodo suficientemente largo? Que te va a dar un ataque de ansiedad porque vas a contemplar tu Vida tal y como es desde tus creencias.
Eso no lo quiere experimentar casi nadie y perpetuamos todo lo que vemos. Porque participar del entretenimiento para no vernos, lleva asociado el precio de “validar” lo que vemos y no nos gusta: guerras, egoísmo, violaciones, pobreza, suicidios, desesperación, …
¿Pero y qué tiene que ver una cosa con otra, te preguntarás? Todo está interconectado. Esta realidad tan sólida que creemos vivir tiene su base en TU/MI Validación. Y lo validamos en su integridad. Sin ella, el mundo se desmoronaría frente a nuestros ojos.
Cuando te aburras de verdad, cultivarás la virtud más necesaria en el contexto actual, la Atención.
Cuando eres capaz de prestar atención ininterrumpida al “objeto” elegido durante el tiempo que decides, empiezas a actuar por encima de tus instintos y de tu destino. Tu nivel de consciencia se eleva automáticamente.
Y se abre la verdad. ¿Pero, a quién le interesa la verdad pudiéndose entretener?
¿Te imaginas que te hubieran enseñado en el colegio a estar una hora sólo sin hacer nada y pasártelo como en el mejor de tus sueños?
El sistema colapsaría, dejarías de ser un esclavo y tu mirada cambiaría.
Y, por cierto, sabrías qué es lo importante.
